por el pastor Kevin Sadler
La Sociedad Bíblica Bereana (Berean Bible Society) publica diariamente en su sitio web artículos devocionales con el nombre Two Minutes with the Bible, y más recientemente su versión en español, Dos Minutos con la Biblia, a los cuales puede suscribirse siguiendo los enlaces anteriores. En 2T15, publicamos traducciones al español de dichos artículos, con la finalidad de poner el mensaje de la gracia de Dios al alcance de los hermanos en Cristo de habla hispana. Sea de bendición para su vida.
Ver original
Respondió Jesús: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios. (Juan 3:5 - RV1960)
Un par de versículos antes, el Señor Jesucristo le dijo al fariseo Nicodemo: «De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios» (Juan 3:3). La palabra «nacer de nuevo» significa literalmente nacer de nuevo desde arriba. Así, Cristo le dijo a Nicodemo que, para entrar en el reino de Dios, una persona debe recibir un nacimiento espiritual, un renacimiento, una vida nueva de lo alto.
Sin embargo, Nicodemo quedó desconcertado y perplejo por las palabras de Cristo acerca de nacer de nuevo, y no comprendió su significado espiritual. Es comprensible que luego le hiciera al Señor preguntas absurdas, esperando una respuesta negativa, porque seguramente Cristo no quiso decir algo tan imposible como un segundo nacimiento físico. Nicodemo preguntó: «¿Cómo puede un hombre nacer siendo viejo? ¿Puede acaso entrar por segunda vez en el vientre de su madre, y nacer?» (Juan 3:4). El Señor respondió que «el que no naciere de agua y del Espíritu» (Juan 3:5), no puede entrar en el reino de Dios.
Respondiendo a la protesta de Nicodemo acerca de nacer después de haber crecido completamente o al entrar por segunda vez en el vientre de la madre, el Señor le indicó a Nicodemo que hay dos clases de nacimiento, el del agua y el del Espíritu, es decir, el natural y el espiritual. Creo que nacer del agua habla de nacer de la carne, o nacimiento físico. La ruptura del agua en el nacimiento natural es lo que da sentido a la expresión «del agua y del Espíritu». Nacer del Espíritu (Juan 3:5-6) se refiere a la obra de renovación y renacimiento espiritual del Espíritu Santo. Así, el Señor está describiendo el nacimiento y el renacimiento, el nacer y el nacer de nuevo. Estaba diciendo que, a menos que uno nazca de mujer («de agua») y nazca de arriba («del Espíritu»), no puede entrar en el reino de Dios. Refiriéndose a los dos nacimientos, el Señor dijo en el siguiente versículo: «Lo que es nacido de la carne, carne es; y lo que es nacido del Espíritu, espíritu es» (Juan 3:6).
El viejo adagio cristiano, atribuido a Martín Lutero, es cierto: «El nacido una vez, muere dos veces [Apocalipsis 20:14-15]; el nacido dos veces, muere una vez».
Al lector (por Berean Bible Society): Algunos de nuestros artículos de Dos minutos fueron escritos hace años por el pastor C. R. Stam para publicarse en periódicos. Cuando muchos de estos artículos se compilaron posteriormente en forma de libro, el pastor Stam escribió esta palabra de explicación en el prefacio: «Hay que tener en cuenta que la columna del periódico, Dos minutos con la Biblia, se publica desde hace muchos años, por lo que los acontecimientos locales, nacionales e internacionales se discuten como si hubieran ocurrido recientemente. En lugar de reescribir o fechar estos artículos, los hemos dejado tal como estaban cuando se publicaron por primera vez. Esto, nos pareció, añadiría interés, especialmente porque nuestros lectores saben que aparecieron por primera vez como artículos de periódico». A esto añadiríamos que lo mismo ocurre con los artículos escritos por otros que seguimos añadiendo, periódicamente, a la biblioteca de Dos minutos. Esperamos que esté de acuerdo en que, aunque algunas de las referencias de estos artículos son de hace tiempo, las verdades espirituales que enseñan son atemporales.
0 Comentarios