¿Podremos Reconocernos En El Cielo?

Paul M. Sadler|Creemos que podremos reconocernos en el cielo, lo cual, como vamos a ver, puede corroborarse a partir de la revelación de Pablo.

por el pastor Paul M. Sadler

La Sociedad Bíblica Bereana (Berean Bible Society) publica diariamente en su sitio web artículos devocionales con el nombre Two Minutes with the Bible, y más recientemente su versión en español, Dos Minutos con la Biblia, a los cuales puede suscribirse siguiendo los enlaces anteriores. En 2T15, publicamos traducciones al español de dichos artículos, con la finalidad de poner el mensaje de la gracia de Dios al alcance de los hermanos en Cristo de habla hispana. Sea de bendición para su vida.

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“Tenemos una pregunta que necesita respuesta. A menudo escuchamos de los creyentes y pastores de la gracia que, en el cielo, reconoceremos a los santos que hemos conocido en la tierra. Por favor, muéstranos en las epístolas de Pablo dónde se puede encontrar esto”.

Creemos que podremos reconocernos en el cielo, lo cual, como vamos a ver, puede corroborarse a partir de la revelación de Pablo. Pero debe recordarse que el tema del reconocimiento en la eternidad es un principio bíblico que trasciende las edades y las dispensaciones.

En la epístola de Pablo a los Filipenses, el apóstol revela a estos queridos santos, algunos de los cuales estaban sufriendo persecución, que su “ciudadanía está en los cielos, de donde también esperamos al Salvador, al Señor Jesucristo; el cual transformará el cuerpo de la humillación nuestra, para que sea semejante al cuerpo de la gloria suya” (Filipenses 3:20,21 - RV1960). La frase clave aquí es que estos viejos cuerpos de humillación serán transformados “para que sea semejante al cuerpo de la gloria suya” en la resurrección secreta en Su venida: el Rapto. En otras palabras, lo que fue cierto para el cuerpo resucitado glorificado de nuestro Señor también será cierto para el nuestro. Por supuesto, sabemos que los discípulos reconocieron al Cristo resucitado cuando se les apareció en el aposento alto.

“Luego dijo a Tomás: Pon aquí tu dedo, y mira mis manos; y acerca tu mano, y métela en mi costado… Entonces Tomás respondió y le dijo: ¡Señor mío, y Dios mío!” (Juan 20:27,28). No había ninguna duda en la mente de Tomás de que Aquel que estaba delante de él era el Señor. Él claramente lo reconoció. De manera similar, seremos conocidos en gloria, tal como se nos conoce actualmente, como miembros del Cuerpo de Cristo.

Se puede encontrar apoyo adicional en cuanto a que las personas se reconocerán entre sí en la eternidad en Mateo 8:11; Lucas 16:19-31 y Juan 11:21-26.


Al lector (por Berean Bible Society): Algunos de nuestros artículos de Dos minutos fueron escritos hace años por el pastor C. R. Stam para publicarse en periódicos. Cuando muchos de estos artículos se compilaron posteriormente en forma de libro, el pastor Stam escribió esta palabra de explicación en el prefacio: “Hay que tener en cuenta que la columna del periódico, Dos minutos con la Biblia, se publica desde hace muchos años, por lo que los acontecimientos locales, nacionales e internacionales se discuten como si hubieran ocurrido recientemente. En lugar de reescribir o fechar estos artículos, los hemos dejado tal como estaban cuando se publicaron por primera vez. Esto, nos pareció, añadiría interés, especialmente porque nuestros lectores saben que aparecieron por primera vez como artículos de periódico”. A esto añadiríamos que lo mismo ocurre con los artículos escritos por otros que seguimos añadiendo, periódicamente, a la biblioteca de Dos minutos. Esperamos que esté de acuerdo en que, aunque algunas de las referencias de estos artículos son de hace tiempo, las verdades espirituales que enseñan son atemporales.

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