por el pastor John Fredericksen
La Sociedad Bíblica Bereana (Berean Bible Society) publica diariamente en su sitio web artículos devocionales con el nombre Daily Transformation, y más recientemente su versión en español, Transformación Diaria, a los cuales puede suscribirse siguiendo los enlaces anteriores. En 2T15, publicamos traducciones al español de dichos artículos, con la finalidad de poner el mensaje de la gracia de Dios al alcance de los hermanos en Cristo de habla hispana. Sea de bendición para su vida.
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En 1758, Robert Robinson escribió el himno “Ven, fuente de toda bendición”. En el segundo verso, comienza con estas palabras: “Aquí levanto a mi Ebenezer”. ¿Pero qué significa eso? Su significado está extraído de Primera de Samuel, Capítulo Siete. La nación de Israel acababa de volver a dedicarse a “servir” únicamente Jehová; y estaban trayendo el Arca de Jehová, el símbolo de la bendición de Dios, de regreso a Mizpa. Como resultado, sus enemigos, los filisteos, subieron a la batalla contra ellos. Después de que el profeta Samuel oró sinceramente pidiendo la ayuda de Jehová, Israel recibió una victoria sobrenatural.
Luego de eso, “tomó luego Samuel una piedra y la puso entre Mizpa y Sen, y le puso por nombre Eben-ezer, diciendo: Hasta aquí nos ayudó Jehová” (I Samuel 7:12 - RV1960). La palabra “Ebenezer” proviene de las palabras hebreas “Eben haezer” (eh’-ben haw-e’-zer), que simplemente significa “piedra de ayuda”. Un Ebenezer, entonces, es una piedra conmemorativa que se coloca para recordar a los creyentes que Jehová ha ayudado y bendecido en el pasado y, por implicación, que Dios los ayudará en el futuro. Samuel levantó una piedra conmemorativa, o un Ebenezer, con el fin de recordarse a sí mismo y a todos en Israel este principio. El escritor de himnos Robert Robinson escribió que lo había hecho simbólicamente. Mientras cantamos acerca de levantar a nuestro Ebenezer en el himno “Ven, fuente de toda bendición”, reconocemos que Dios también nos ha ayudado.
Todavía usamos memoriales con bastante frecuencia hoy en día. Cada lápida es un monumento a un ser querido que nos recuerda su amor e impacto. El exterior del monumento a Washington en Washington D.C. está hecho en gran parte de piedra. Nos recuerda al Padre de nuestro País, su astuto liderazgo como General y luego su servicio como nuestro humilde primer Presidente. Asimismo, el muro del Memorial de la guerra de Vietnam es un recordatorio de los valientes hombres y mujeres cuyas vidas fueron arrebatadas mientras luchaban en nombre de nuestro país. Este escritor tuvo una vez una enorme piedra ornamental en el patio delantero como recordatorio de las bendiciones y provisiones anteriores de Dios. Hoy sería un buen momento para detenerte y elevar tu Ebenezer al Señor, agradeciendo en oración a Dios por Sus divinas bendiciones e intervención en tu vida. Podrías mejorar este recordatorio enumerando las respuestas personales a tus oraciones, con sus fechas, al frente de tu Biblia. Hacerlo puede ser un recordatorio de que Dios aún puede intervenir en su vida en los días venideros.
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