por el pastor John Fredericksen
La Sociedad Bíblica Bereana (Berean Bible Society) publica diariamente en su sitio web artículos devocionales con el nombre Daily Transformation. En 2T15, publicamos traducciones al español de dichos artículos, con la finalidad de poner el mensaje de la gracia de Dios al alcance de los hermanos en Cristo de habla hispana. Sea de bendición para su vida.
Ver original
Un hombre cristiano se lamentó conmigo de cómo había resultado su vida. A causa del alcohol y de malas decisiones, había perdido su trabajo, su familia y muchos de sus amigos. Culpó a su padre por no prestarle atención, culpó a otros cristianos por sus ofensas y luego culpó a Dios. Entre otras cosas, dijo: “Solo desearía saber cuál es la voluntad de Dios para mi vida. Todos mis amigos sabían exactamente lo que Dios quería que hicieran con sus vidas, pero Dios nunca me lo mostró”. No estaba tomando responsabilidad personal por sus decisiones y no entendía la voluntad de Dios.
El diccionario Webster define “misticismo” como “cualquier doctrina que afirma el conocimiento de las verdades espirituales a través de la intuición o la meditación, pensamientos o creencias vagas, de carácter o significado oculto”. Sin darse cuenta, muchos creyentes abrazan el concepto de misticismo mientras buscan la voluntad de Dios en sus vidas. Dios tiene una idea mejor. Gálatas 4:1-7 explica que Dios trata con nosotros, no como niños, sino como hijos adultos. Gálatas 5:1 nos dice que tenemos gran libertad para tomar decisiones en la vida sin que Dios controle cada detalle. Eso significa que Él nos da la libertad de elegir con quién nos casaremos (I Corintios 7:39), qué trabajo realizaremos (I Timoteo 3:1), incluso adónde vamos (I Corintios 16:12). Esto significa que Dios nos da amplia libertad para decidir nuestra dirección en la vida, pero Él obrará en nosotros todos los días, independientemente del camino que elijamos. Pero Dios también nos ha dicho claramente que podemos entender Su voluntad hoy (Colosenses 1:9; Efesios 5:17). Es la voluntad de Dios que “… todos los hombres sean salvos y vengan al conocimiento de la verdad” (I Timoteo 2:4), y “… librarnos del presente siglo malo…” (Gálatas 1:4). “Pues la voluntad de Dios es vuestra santificación; que os apartéis de fornicación; que cada uno de vosotros sepa tener su propia esposa en santidad y honor…” (I Tesalonicenses 4:3-4). Luego, “Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús” (I Tesalonicenses 5:18). Más allá de esto, todas las instrucciones obvias en las cartas de Pablo son la voluntad de Dios: ser transformados (Romanos 12:2), caminar en novedad de vida (Romanos 6:4), renovar nuestra mente a través de las Escrituras (Efesios 4:23; 3:16), y muchas cosas más relacionadas con el crecimiento en la piedad.
¿Has estado buscando comprender la voluntad de Dios para tu vida? No necesitas una experiencia mística ni un seminario. Comprende tu libertad en Cristo y los principios de las epístolas de Pablo que definen claramente la voluntad de Dios.
0 Comentarios